El presidente de la Cámara de la Industria de la Moda hizo un balance luego de la primera semana del regreso parcial a la actividad del sector. "Esto nos permite mantener activos puestos de trabajo de talleres, venta de telas, mercerías, casas de planchado" indicó.
Para el amplio y diverso sector de la industria de la moda ha sido un alivio poder volver, parcialmente, a la actividad, siguiendo estrictos protocolos. A una semana de la firma del decreto que autorizó el funcionamiento de ateliers, sastrerías y academias de fotografías y modelos, el presidente de la Cámara, Adrián Caballero, destacó que es una forma de comenzar a volver a poner en movimiento un sector que, hasta ese momento, había concentrado todas sus energías en colaborar, realizando barbijos, camisolines y demás insumos necesarios para el personal de la salud.
En primer lugar Caballero aclaró que “no se están permitiendo las pruebas de prendas de perchero, en esos casos estamos igual que el resto de los comercios de la ciudad”.
Dicho esto, señaló que “si estamos tomando turnos para las tomas de medidas y pruebas de prendas hechas a medida”. Para ello, enumeró que “atendemos con las medidas básicas de sanitización, con camisolín, barbijo, máscara y desinfección, nos tomamos dos horas entre turno y turno para higienizar todo, cada clienta puede venir solo con un acompañante y les tomamos todos los datos”.
Además explicó que “entre el taller y la clienta, la prenda se traslada en fundas y debidamente sanitizada, al igual que todos los elementos que se utilizan en la prueba: alfileres, tijeras, centímetros, etc. Es un proceso largo, pero estamos muy comprometidos con la salud” apuntó.
De todas formas valoró que la industria -“que implica mucho más que un lindo vestido”- es una importante fuente laboral en la ciudad “sobre todo en el segundo y el tercer cordón”. “Estamos muy comprometidos con la formación profesional y con generar trabajo, para ello, necesitamos estar en marcha”.
El referente de la moda y uno de los fundadores de la Cámara de la Industria de la Moda de Mar del Plata, indicó que “por supuesto, se han suspendido todas las fiestas y eventos de este año, pero hay otros que se están reprogramando para el año que viene. Con madrinas, novias, cumpleañeras, podemos seguir trabajando con tiempo”.
Paralelamente el sector ya está pensando en cómo las nuevas colecciones se van a adaptar a la “nueva normalidad”. “No va a haber vestidos de noche, no pret a porter, porque no se puede salir, pero si vamos a tener colecciones con moda primavera-verano informal, para la vida cotidiana, pero elegante, adaptada a esta nueva realidad”.
“La prioridad es cuidarnos, pero de a poco y con mucha dedicación estamos organizando la manera de volver a insertarnos para el día después, cuando podamos volver a las fiestas”.
Vale señalar que el sector de la moda en Mar del Plata ocupa directa e indirectamente a unas 4500 personas. “En el 80% de los casos somos trabajadores independientes, autónomos” indicó. La mayor proporción de su mercado es local y regional, con proyección a distintas provincias, con clientes que pasan varios días de vacaciones en el verano y aprovechan para encargar y realizarse prendas a medida.